miércoles, 27 de mayo de 2009

El próximo día 30 de mayo, sábado, a las 20,30 horas, se presentarán los vinos de Almendralejo en Sevilla


(elavisadordebadajoz)

El próximo día 30 de mayo, sábado, a las 20,30 horas, y patrocinado por la Excma. Diputación Provincial de Badajoz, se presentarán los vinos de Almendralejo en Sevilla, presentación que se hará en barco con un recorrido por el Guadalquivir, saliendo de la Torre del Oro. Incluye una conferencia sobre flamenco por José Luis Villares y la actuación de la cantaora Esther Merino, la bailaora Silvia Paz y a la guitarra, Francisco Pinto, La organización corre a cargo de la Casa de Extremadura en Sevilla.

miércoles, 20 de mayo de 2009

Caceres: CATY PALMA BAILAORA DE FLAMENCO


(HOY.ES)
La bailaora cacereña Caty Palma presenta su espectáculo. /M. N.
TEMPERAMENTO
Gran Teatro, día 22, 22,00
Qué es: 'Temperamento' es el último espectáculo de la bailaora cacereña Caty Palma. Actúa acompañada de Felisa Vega al cante, José, 'Pira' al toque, José Cerro al violín, el bajo de Luis Sanz, la percusión de Mario Holgado y las palmas y jaleos de David Kintana y la participación especial de Estefanía Busciglio. La entrada cuesta 10 euros.
Palma suma más de una década de espectáculos en su larga carrera
La vida, para Caty Palma, es flamenco y es baile. Y el baile y el flamenco, la relación es recíproca, es su vida. No hay espacios intermedios, todo va unido como siameses. Tanto, comenta, que le quita tiempo para «tirarme en el sofá, viajar o leer», sus aficiones. Pero así son los amores totales: absorbentes y exclusivos. Bailaora profesional y directora de una escuela de baile desde hace décadas, Palma presenta su último espectáculo, 'Temperamento', en el que brilla como figura principal, aunque se acompaña de una decena de artistas al cante, al toque y al baile. El viernes, a las 22,00 horas en el Gran Teatro presenta un espectáculo hecho de pasión y energía. Muchas horas de trabajo volcadas en 90 minutos.
-¿Cómo surge 'Temperamento'?
-Surge antes que 'Caballos al compás', pero éste fue un espectáculo de mucho trabajo y desplazó un poco a 'Temperamento'. Se llama así porque yo he querido, aunque esté mal decirlo, personalizarme un poco más en mi propio espectáculo. El título va mucho con mi personalidad. A mí me gusta mucho trabajarme la puesta en escena, hay muchas cosas novedosas que yo creo que va a gustar.
-¿Así que usted va a ser la protagonista del espectáculo?
-Sí. Está mal decirlo pero en este caso voy a ser yo la protagonista, aunque estoy muy bien rodeada. Todo está creado específicamente para este montaje, nunca repito nada. Un estreno.
-¿Qué tiene de especial?
-La puesta en escena no tiene desperdicio, para mí es algo fundamental. Los músicos van a hacer unos temas divinos. Son un conjunto de cosas que crean un todo muy bonito.
-¿Cuánto trabajo implica montar un espectáculo así?
-Pues como unos ocho o nueve meses. Primero los músicos preparan los temas, luego el baile. Son muchísimas horas de ensayo, es mucho trabajo. Es una pena que en una hora y media se termine todo.
-Parece un aspecto menos importante, pero el asunto de la ropa le quitará mucho tiempo.
-Sí, lleva mucho tiempo decidir cuales son los colores y los modelos que quieres llevar, elegirlo bien en función de lo que hagas. Yo tengo cuatro cambios de vestuarios y no se repiten. Eso es lo más caro.
-¿Qué vida va a tener 'Temperamento'? ¿De qué depende?
-Depende de cada artista y de las galas que tengo. Mi opinión es que llevar un espectáculo durante tres temporadas, por ejemplo, es un poco monótono.
-Supongo que cada espectáculo se llevará una parte importante de usted...
-Hay alguno que te gusta más que otros pero los trabajas todos por igual. Con el último siempre te sientes más ilusionado, te sientes como un niño con zapatos nuevos.
-En este espectáculo va a estar batiéndose el cobre durante mucho tiempo sobre el escenario...
-Pues sí. Bailo alegrías, tarantos, soleá. Con un palo me puedo estar bailando más de diez minutos sobre el escenario. Al final es un agotamiento tremendo, sobre todo si te entregas. Y yo me entrego mucho, de ahí viene el nombre del espectáculo.
-¿Y en qué piensa cuando pisa el escenario?
-No se piensa en nada, se te queda la mente en blanco, solamente escuchas la guitarra y el cante, y eso es lo bonito. Yo salgo con mi miedo, sigo con mis nervios, pero luego se van. Al público no le ves, ves una nube blanca, caras que no identificas.
El aplauso
-¿Qué gusta más, el aplauso o que le digan directamente que el espectáculo ha gustado?
-El aplauso gusta, claro que sí, es una recompensa. Y también que la gente te lo diga con sinceridad que es algo que se nota mucho, cuando te lo dicen con el corazón.
-¿Le gusta algún otro tipo de baile que no sea el flamenco?
-Sí, sí, todo lo que sea música me encanta. Yo lo respeto todo, hay que abrirse a todo.
-¿Hay interés en Cáceres por el flamenco?
-A la gente en Cáceres le encanta las sevillanas, le encanta la rumba, le encanta el flamenco. Este año hemos tenido en la academia 191 alumnos. Tocamos otros palos, como la danza del vientre o bailes de salón, pero lo que más interesa es el flamenco.
-La programación cultural flaquea en espectáculos de danza. Se ven por aquí pocas giras nacionales...
-Sí, es escaso. Yo estoy de acuerdo de que vengan artistas de fuera, pero creo que deberían mimarnos más a los que estamos aquí. La pena es que tengamos que poner nuestros espectáculos más económicos para poder llenar. La producción de este espectáculo y es muy cara. No sé si voy a llenar o no, cuando estrené 'Sueños' se quedó gente en la calle, igual que con el espectáculo de los caballos, pero no sé lo que pasará con éste.
-Usted siempre dispone del Gran Teatro para sus espectáculos.
-Sí. Y yo estoy agradecidísima a las instituciones, y soy consciente de que en muchas ocasiones no hay medios económicos para todos.

domingo, 3 de mayo de 2009

El mundo flamenco hace un homenaje al EXTREMEÑO Ramón El Portugués

(TERRA NOTICIAS)

Ramón El Portugués, uno de los grandes cantaores que ha dado Extremadura, lleva un tiempo 'despegado' del cante por un problema en las rodillas que le hace sentirse 'melancólico'. Ahora, amigos suyos como Enrique Morente, Diego El Cigala o Pitingo, se han unido para devolverle al flamenco.
Será con dos conciertos que se celebrarán el 4 y el 11 de mayo en la sala Cardamomo de Madrid, en los que éstos, junto a otros artistas como Pepe Habichuela, José El Francés, Los Chunguitos, La Excepción, Belén López o Josemi y Juan Carmona, pretenden recaudar fondos para sufragar una operación de ligamentos de rodilla del cantaor y hacerle un homenaje cuando el cantaor cumple 50 años de vida artística.
'Llevo tres o cuatro años deambulando sin saber qué me pasaba, eso me desconcertaba, estaba melancólico, había perdido el rumbo del cante y no cogía ni la guitarra. Ahora que ya sé qué me pasa y que tiene una solución me han entrado unas ganas tremendas de cantar. En esos conciertos cantaré, si no canto yo, no cantará nadie', dice Ramón El Portugués en una entrevista con EFE.
Nacido en Mérida hace 61 años, El Portugués inició su carrera de niño.
Con poco más de diez años su tío, el gran cantaor Porrina de Badajoz, le hizo viajar a Madrid para trabajar con él en locales flamencos y fiestas privadas, en las que tuvo la oportunidad de aprender de las grandes figuras de la época.
'Venía la policía y yo dejaba el cante y me tenía que hacer pasar por botones, porque era muy de noche para un niño', recuerda Ramón El Portugués, de quien dicen que Camarón de la Isla aprendió algunos 'giros' de voz. 'Éramos uña y carne, dos fuentes con la misma agua, pero él mejoró lo que yo hacía'.
'Yo he tirado mi carrera por los vicios, no he tenido continuidad, era muy rebelde y me gustaba ir a mi aire. Era bebedor y drogadicto. Si no me tomaba cinco o siete güisquis y me metía mis cositas en el camerino, no salía. Camarón tenía sus cositas, pero su mayor droga era el cante, era lo que más le gustaba del mundo, se metía en su estudio y se podía pasar todo el día escuchando cintas', cuenta.
Se quitó de todos sus vicios hace 16 años cuando se enganchó a la religión evangélica. 'Soy la misma persona, pero estoy más clarito, tengo más luz. Con un vaso de agua se canta mejor', asegura este cantaor que dice que entre los cantaores gitanos y los payos hay diferencia. 'Yo los distingo en cuanto los escucho en el metal de la voz, el de los gitanos es más rajao, más profundo'.
En el escenario la improvisación le arrastra: 'Yo a veces he intentado preparar las canciones de un concierto, pero en cuanto subo se me olvidaba todo', apunta mientras asegura que en su carrera ha contado con el reconocimiento 'de los artistas gitanos y no gitanos'. 'Yo con el de ellos me doy por satisfecho', dice para asegurar después que no ha sido así con 'algunos empresarios que son un poco mafiosos' y que sólo buscan defender 'a sus artistas, como si fueran intocables'.
Es padre del guitarrista Paquete, de La Barbería del Sur, con quien quiere grabar un disco, y de Israel Piraña, Ramón Porrina y Sabu, que tocan el cajón flamenco para Paco de Lucía, el primero, para Concha Buika, el segundo y para Diego El Cigala, el tercero.
Sobre los nuevos cantaores dice que hay 'buenas voces a las que les falta afición' para aprender 'los cantes de los viejos, que son como una universidad que hoy en día, con Internet, están al alcance de la mano'. 'Para aprender hay que empezar la casa por abajo para que no se caiga después y hoy quieren triunfar enseguida grabando un disco, ya no se escuchan ni los unos a los otros'.